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El Departamento de Estado de los Estados Unidos recomendó durante esta semana a todas aquellas personas cuyos pasaportes expiran en el 2016, que los renueven cuanto antes.
Según la comunicación emitida, la agencia espera que surja una demanda excesiva de peticiones y renovaciones durante este año que puede provocar que las personas no reciban sus pasaportes a tiempo para poder acudir a viajes planificados fuera del país.
Según el comunicado, se espera que haya una alta demanda de renovaciones de pasaportes con más de 10 años, expedidos entre los años 2006 y 2007. El 2007 fue el año en que se adoptó la Iniciativa de Viajes del Hemisferio Oeste, requiriendo pasaportes por primera vez a los estadounidenses que regresaran de viaje por aire desde México, Canadá, el Caribe y Bermuda.
Habrá además un aumento en solicitantes primerizos de estados en América que no han cumplido con la Ley de Identificación Real, que dispone estándares más estrictos para licencias de conducir y otras tarjetas de identificación. A partir del anuncio de esta ley, ha surgido una confusión respecto a la fecha hasta la cual las personas podrán utilizar sus licencias de conducir para viajar entre estados.
A tal efecto, el Departamento de Seguridad Nacional clarificó recientemente que la fecha final hasta la cual podrá utilizarse licencias de conducir para viajar es enero 22 del 2018.
Otra razón por la cual las personas deben renovar sus pasaportes cuanto antes es porque muchos estados han establecido un requerimiento de que sólo se pueda viajar con pasaportes a los que no le queden menos de seis meses de validez.
Los funcionarios del Departamento de Estado esperan emitir más de 17 millones de pasaportes nuevos y renovaciones este año, alrededor de 1.5 millones más que en 2015. Los que buscan un pasaporte por primera vez deben presentar la solicitud en persona en una oficina de correos designada u otra agencia, y el costo es de $135. Las renovaciones toman alrededor de seis semanas en 2016, frente a cuatro semanas el año pasado. La mayoría de los estadounidenses pueden renovar pasaportes por correo, por un precio de $110.