Por Daniel Rivera Vargas

La desestimación o el estado de suspenso de varios casos criminales contra Donald Trump no debería sorprender, considerando su holgado triunfo en las elecciones y el impacto que la presidencia de Estados Unidos tiene en la sociedad, afirmó Jesús Rivera Delgado, litigante en casos penales a nivel estatal y federal.

«Eso era predecible. Hay personas que piensan que la institución de la presidencia hay que preservarla a como dé lugar, quizá otros por temor hacia las promesas de Trump y el control que tiene sobre la nación americana. Hay que resaltar que en este momento ganó de forma contundente, básicamente arrasó, y eso pesa en mucha gente. Ahora no solo ganó el colegio electoral sino el voto popular», mencionó Rivera Delgado.

Donald Trump enfrentaba dos casos criminales estatales y dos federales, pero estos se han diluido pocas semanas después de su triunfo sobre Kamala Harris, candidata demócrata a la presidencia.

Por ejemplo, el juez Juan Merchan, magistrado de la corte estatal de Nueva York, anunció la semana pasada que dejaba sine die —es decir, sin fecha definida— la celebración de la vista de sentencia contra Trump, relacionada con su condena en mayo pasado por 34 cargos de falsificación de documentos de campaña durante su contienda contra Hillary Clinton en 2016.

Asimismo, el lunes, el fiscal federal Jack Smith anunció que solicitaría la desestimación de los cargos federales contra el recién reelecto mandatario en dos casos criminales: el relacionado con el ocultamiento de expedientes confidenciales en su residencia de Mar-a-Lago.

Al momento de redactar esta nota, no se había informado qué ocurrirá con el caso estatal en Georgia, también vinculado a los actos posteriores a las elecciones de 2020. Sin embargo, Rivera Delgado considera que este caso podría tener un desenlace similar al de los otros.

En su entrevista con Microjuris, Rivera Delgado señaló que, si eventualmente se sentenciara a Trump en el caso de Nueva York o si el caso de Georgia continuara y resultara en una condena, es importante recordar que el asunto podría llegar al Tribunal Supremo de Estados Unidos. Además, destacó que dicho tribunal probablemente falle a su favor, como ya lo ha hecho en varias ocasiones.

«El Supremo rechaza el 97% de los casos que le presentan, pero ellos pueden escoger los casos que quieran».

Rivera Delgado afirmó que esto representa una especie de extensión de la reciente decisión del Tribunal Supremo de Estados Unidos sobre la inmunidad presidencial.

Aunque la decisión limita dicha inmunidad a los actos realizados durante el ejercicio del cargo presidencial, precisó que muchos interpretarán esta doctrina de manera más amplia, extendiéndola a otros ámbitos. Esto podría resultar en una protección frente a acusaciones penales aún más flexible que la establecida originalmente en la jurisprudencia.

Impacto de sentencia estatal contra Donald Trump tras su reelección como presidente

«Esto se ha extendido y parece que todo lo que él (Trump) hace está cobijado por la inmunidad presidencial», sostuvo Rivera Delgado.

El también profesor en la Universidad del Sagrado Corazón y presidente de la junta de directores de la Sociedad de Asistencia Legal expresó su pesar, especialmente por la decisión de no continuar con el caso relacionado con la llamada insurrección de 2021.

«Se le está dando luz verde para quedar impune de las actuaciones del 6 de enero. Tenemos que recordar que el 6 de enero del 2021 fue una insurrección, incitada por él, en el que hubo personas que murieron. Una insurrección. Si eso fuera provocado por latinos, negros o grupos minoritarios eso hubiera acabado a tiro limpio, sostuvo Rivera Delgado.

«Eso atenta contra las instituciones. El 6 de enero es el día en el que oficialmente se elige al presidente de Estados Unidos. Obviamente la elección es la zapata, donde comienza todo, y en diciembre hay un proceso donde se ratifica el colegio electoral y la última votación es el 6 de enero. Ese asunto del 6 de enero es más trascendental de lo que parece, ahí se estaba ratificando el proceso de la elección del presidente», añadió.

Asimismo, Rivera Delgado dijo que este proceso revela un singular escenario respecto al tema de los derechos constitucionales.

«Es interesante que Trump se está aprovechando de los derechos constitucionales, ejerciendo su libertad de expresión, pero en términos del mensaje que está anunciando pone en peligro los derechos de las personas que no están al nivel social de él. Los derechos de las personas acusadas, de los derechos civiles, constitucionales, que parten de los derechos humanos, podrían estar en riesgo para la sociedad. En término de las cosas que él ha dicho y que los electores de Estados Unidos han avalado, y él lo está interpretando como un mandato», afirmó.

Mencionó, por ejemplo, la intención de utilizar al ejército contra la población civil, como en el caso del proyecto para expulsar a indocumentados.

También destacó el impacto que tendría su plan de reducir en un 75% la cantidad de empleados del gobierno federal, considerando que este ha sido históricamente el brazo gubernamental encargado de proteger los derechos civiles de las comunidades marginadas.

«En la medida que desmantelas el gobierno federal, estás desmantelando derechos», indicó Rivera Delgado.