Por María Soledad Dávila Calero

El Proyecto de la Cámara 120 o Ley para un Retiro Digno está más cerca de llegar al escritorio del gobernador Pedro Pierluisi con la aprobación por el Senado con 25 votos a favor. Esta media buscaba establecer como política pública que no se harán recortes a las pensiones ni a los servicios esenciales y busca darle clasificación prioritaria a los pensionados en el proceso de reestructuración de deuda.

Además, el proyecto promueve que eventualmente se establezca un Fidecomiso para la Administración Conjunta para los Sistemas de Retiro o FACSiR, que cubriría a los sistemas de retiro del gobierno central, la judicatura y de maestros. El proyecto además revierte los cambios a los sistemas de retiro para devolverlos a plan de beneficio definido.

El Proyecto de la Cámara 120 también busca abrir a la posibilidad que sea impugne por lo menos una porción de la deuda pública de Puerto Rico.

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Durante el turno de debate en el hemiciclo del Senado no se dieron turnos en contra al Proyecto de la Cámara 120 aunque se dieron algunas reservas sobre el contexto más amplio en el que se está aprobando este proyecto.

Necesaria la medida

El senador del Partido Nuevo Progresista, Henry Neumann Zayas, insistió en la importancia de aprobar la medida por entender que los pensionados están en una posición injusta para ellos y estas personas se ganaron su dinero de retiro durante su tiempo como empleados del gobierno. Neumann Zayas además hizo un reconocimiento a los grupos de pensionados que estaban en las gradas del Senado viendo el transcurrir de la sesión legislativa.

«No es culpa de ellos [los pensionados] que el gobierno de repente cae en una condición de quiebra y caigamos nosotros en manos de unas personas que van a tomar unas determinaciones relacionadas a sus pensiones. Esas pensiones les pertenecen», dijo Neumann Zayas aludiendo a la propuesta de la Junta de Supervisión y Administración Financiera que propone un recorte a las pensiones de $1,500 al mes.

Además, el senador por el Partido Popular Democrático (PPD), Ramón Ruiz Nieves, dijo a favor del proyecto que «hoy sí se estaba hablando de justicia social». Por otro lado, también argumentó que esta medida le da herramientas al gobernador para que pueda hacerle frente a la junta fiscal, ya que Pierluisi ha dicho que no está a favor de recortes a las pensiones.

Hace falta otros elementos

Por su parte, el senador del PPD, Juan Zaragoza, quien preside una de las comisiones que atendió la evaluación del Proyecto de la Cámara 120, dijo no estar en contra de la medida, pero entendía que la misma no era ejecutable porque requeriría que la junta fiscal no le ponga trabas a la medida, particularmente en la corte de Título III en la que se están llevando los procesos adversariales de la reestructuración de la deuda pública.

En contestación a ese argumento, el senador del Movimiento Victoria Ciudadana, Rafael Bernabe, concedió que la medida requiere de otras acciones, pero planteó que lo que implica para la legislatura es que no debe viabilizar un plan de ajuste de deuda que sea incongruente con el Proyecto de la Cámara 120.

Además, Bernabe argumentó que este proyecto sienta las prioridades para un mejor camino de reestructuración de la deuda.

«Si usted insiste en pagar una deuda insostenible, usted va a tener dos consecuencias: un acrecentamiento de la injusticia social, esa es la primera. La segunda consecuencia es que va a ser ineficiente, porque usted lo que va a hacer es perpetuar la crisis», dijo Bernabe.

Evitar recorte no es suficiente

En su turno a favor de la medida, la senadora del Partido Independentista Puertorriqueño, María de Lourdes Santiago, argumentó que no se debe tomar como positivo que el ochenta por ciento (80%) de los pensionados están exentos del recorte, porque eso significa que la mayoría de los pensionados reciben menos de $1,500 dólares al mes. Santiago argumentó que la meta debería ser buscar la manera de aumentar la cantidad que las personas reciben en su pensión.

En esa línea, la senadora del PPD, Migdalia González, dijo que sabe de muchos empleados con más de los años necesarios para el retiro pero permanecen trabajando porque la pensión no les daría para costear sus necesidades. Mientras que el senador independiente, José Vargas Vidot dijo que hay muchos retirados criando nietos y el sesenta por ciento (60%) están bajo el nivel de pobreza.

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