» Ir al portal nuevo de Microjuris OK
El uso excesivo, innecesario e inapropiado de iluminación nocturna exterior ha creado altos niveles de contaminación lumínica sobre las zonas urbanas y rurales de las islas de Puerto Rico, que nos impide ver las estrellas en el cielo y afecta nuestra capacidad de apreciarlos ambientes naturales oscuros, tal y como sucede con la bioluminiscencia terrestre y acuática en las lagunas y bahías, donde ocurren estos fenómenos tan apreciados por residentes y visitantes de la Isla.
[PROCLAMA] Día para la Concienciación sobre la Contaminación Lumínica en Puerto Rico (PDF)
La contaminación lumínica tiene un impacto adverso en la naturaleza, el disfrute de la propiedad y nuestra calidad de vida, puede afectar la salud de los seres humanos e implica un derroche de recursos energéticos y sus costos, en estos momentos de estrechez fiscal. Asimismo, el uso de la iluminación artificial de manera irresponsable e impropia pone en riesgo el manejo de áreas naturales oscuras, degradando dichos ecosistemas naturales y reduciendo nuestras oportunidades de apreciar el valor escénico, científico turístico de aquellos lugares donde la contaminación lumínica opaca y degradada la visibilidad de la bioluminiscencia.
Ante estos retos, organizaciones sin fines de lucro, agencias de gobierno, miembros de la comunidad universitaria, expertos y expertas, unen esfuerzos en Puerto Rico por tercer año consecutivo para celebrar un foro educativo y científico sobre esta problemática, sus causas y las alternativas para su manejo y controlen la isla.
El 9 de agosto de 2016 de 8:30 a.m. a 4:00 p.m. se llevará a cabo en el Teatro Bertita y Guillermo L. Martínez del Conservatorio de Música de Puerto Rico en Santurce, el Tercer foro sobre prevención y control de la contaminación lumínica, cuyo tema principal será el impacto de la contaminación lumínica en los ambientes naturales oscuros y la bioluminiscencia.
La actividad es un esfuerzo en conjunto de Para la Naturaleza, la Junta de Calidad Ambiental (JCA) y el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA) y otros miembros del Consejo Asesor en Contaminación Lumínica entre otros colaboradores.
El evento es libre de costo y abierto a todo público.
Los tres oradores principales abordarán el estudio de las bahías bioluminiscentes desde perspectivas científicas e históricas. El doctor Michael Latz, investigador del Scripps Institution of Oceanography de la Universidad de California en San Diego, expondrá sobre los factores, incluyendo la contaminación lumínica, que inciden sobre la bioluminiscencia medida y observada en las bahías bioluminiscentes del Caribe. La doctora Brenda Soler Figueroa, Plankton Analyst del Smithsonian Environmental Research Center, detallará los niveles de bioluminiscencia en la Bahía Fosforescente: sus mitos versus la realidad. El Profesor Emérito Juan G. González Lagoa compartirá su investigación sobre las bahías bioluminiscentes en Puerto Rico: su historia, las investigaciones realizadas y los peligros que las amenazan.
El foro quiere crear conciencia entre los ciudadanos, estudiantes, ingenieros, arquitectos, planificadores y profesionales del ecoturismo para que conozcan, vía las presentaciones de otro puñado de expertos en las áreas de la arquitectura, la ciencia y el turismo, entre otros, las disposiciones básicas la Ley 218 de 2008 para el Control y la Prevención de la Contaminación Lumínica y el Reglamento 8493 del 27 de junio de 2014 de la JCA, y cómo pueden contribuir desde su vida cotidiana a reducir esta problemática.
"Tanto la Ley 218-2008, con el Reglamento vigente de la JCA para el manejo y control de la contaminación lumínica en Puerto Rico reconocen como prioritario y apremiante la necesidad de mejorar la calidad de los ambientes oscuros en área de iluminación especial por la existencia de la bioluminiscencia. Esto no es sólo importante debido a cómo dicha contaminación degrada dichos ecosistemas naturales, sino también porque nos priva a todos de la oportunidad de disfrutar y apreciar al valor escénico que dicho fenómeno representa para la ciencia, cultura y sobre todo el turismo ecológico en la Isla. La JCA está comprometida en la lucha contra esta modalidad de contaminación ambiental, pero todos podemos contribuir con medidas relativamente simples de implementar en nuestro hogar o negocio", expresó el presidente de la JCA, el Sr. Weldin F. Ortiz Franco. La JCA estará presentando la charla titulada "El reglamento para el control y la prevención de la contaminación lumínica y las zonas de iluminación especial por bioluminiscencia", por el señor José Alicea Pou, Gerente del Área Control de Ruidos y Contaminación Lumínica, en la cual se discutirán las disposiciones aplicables a dichas zonas en el progreso de los planes de trabajo para su administración y fiscalización.
Para la Naturaleza compartirá su experiencia con la iniciativa Puerto Rico Brilla, en la ponencia «¿Qué ganamos con la oscuridad?» Con esta iniciativa que integra a la ciudadanía, comunidades y empresas, la organización sin fines de lucro redujo el efecto de la contaminación lumínica alrededor de la Laguna Grande en la Reserva Natural Cabezas de San Juan, en Fajardo, mediante un compromiso colectivo con la salud de la bioluminiscencia de este ecosistema. "Con la participación de todos los sectores de nuestra sociedad continuamos avanzando para reducir los efectos de la contaminación lumínica. Mediante la unión de comunidades, ciudadanos, empresas, así como organizaciones y agencias, lograremos minimizar nuestro impacto en la naturaleza para mantener la integridad de los ecosistemas donde hay bioluminiscencia", dijo el licenciado Fernando Lloveras San Miguel, presidente de Para la Naturaleza.
Por su parte, el secretario del DRNA, Nelson J. Santiago Marrero, destacó que con este simposio Puerto Rico se inserta en la discusión de la comunidad científica internacional sobre los efectos negativos de la contaminación lumínica en los anfibios, las aves y las tortugas marinas en peligro de extinción como los tinglares y careyes que anidan en nuestras costas."En aras de trazar estrategias concretas basadas en data empírica para combatir los efectos nocivos en nuestras especies, el Departamento adquirió instrumentos que ayudarán a medir la cantidad de luz en algunas de nuestras costas. Los metros serán instalados en la Reserva Natural de Maunabo, en el Bosque Seco de Guánica, en la Reserva Natural de Mona y en la Reserva Natural de Parguera, lo que ayudará a cuantificar el impacto en la bahía bioluminiscente gracias a la colaboración y experiencia de los científicos de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Mayagüez. Los voluntarios de los grupos tortugueros que trabajan mano a mano con nosotros llevarán también metros portátiles para anticipar el impacto en las tortugas que llegan a anidar y en los nidos al momento de la eclosión. Nuestro personal continúa activo educando a los residentes de condominios, municipios, y gerenciales de hoteles, restaurantes y locales para que utilicen una iluminación apropiada", concluyó Santiago Marrero.