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Por Mayra I. Rosa-Pagán, PE, Esq., CPFC

En esta era digital, donde adquirir productos es tan sencillo como darle a un «clic» en nuestros dispositivos móviles, la temporada navideña presenta un desafío muy particular: la tentación de gastar sin límites. Las compras, las festividades y los regalos ponen un reto a nuestro presupuesto en esta temporada.

Además de comprometer el dinero en mano, muchas personas optan por usar las tarjetas de crédito para comprar esos artículos o cubrir los gastos.

Sin una estrategia clara y control, es fácil perder de vista cuánto hemos gastado, lo que puede complicar nuestra situación económica a largo plazo. Es por eso por lo que esa relación entre las compras y la tarjeta de crédito debe ser analizada con detenimiento para que mantengas el análisis de tu presupuesto y no sea el causante de los dolores de cabeza tan pronto se acaben las fiestas.

Pero ¿por qué es importante observar de cerca ese vínculo?

El nivel de crédito personal es uno de los componentes que demuestra tu salud financiera. Igualmente, la salud crediticia te abre o cierra puertas a la hora de hacer compras grandes, como por ejemplo adquirir una propiedad, comprar el carro de tus sueños o hacer transacciones bancarias para lograr objetivos de negocio. De ahí, la importancia de conocer los factores que afectan tu puntuación de crédito y cómo esa puntuación de crédito limita tus alternativas para expandir tus finanzas personales.

Cuando nos referimos al nivel de tu crédito, estamos enfocados en la puntuación, conocida como «score» o la empírica. Ese número de referencia que puede estar entre 300 y 850, es reportado mediante los informes de crédito y juega un papel crucial para llevar a cabo tus transacciones bancarias y obtener préstamos o tarjetas. Para maximizar tus posibilidades de éxito en cualquier transacción financiera, es recomendable mantener una empírica mayor de 720.

¿Cómo puedes conocer tu puntuación y entender tu historial crediticio?

Existen tres compañías mayormente usadas para obtener tu reporte de crédito: TransUnion, Experian y Equifax. Estos informes incluyen información importante, como son: los tipos de cuentas que posees (ya sean préstamos personales, hipotecarios o para automóvil), los saldos de tus tarjetas de crédito por institución, tu historial de pagos y los límites máximos de crédito que tienes disponible.

El análisis de los aspectos que te afectan la empírica incluye tus hábitos de pago puntual, la cantidad de crédito que tienes comprometido y la cantidad de indagaciones a tu historial de crédito. Un número alto de indagaciones, en un periodo de 2 años, es un indicador de que intentas adquirir más deuda y pone en entredicho tu capacidad de repago.

Asimismo, si todas las compras las haces cargando a la tarjeta, no solo será más difícil saldarla, sino que el porciento de utilización de tu crédito será un factor significativo que afectará tu puntuación. Por eso, en esta época navideña, mantener un buen balance entre las compras y el uso del crédito es fundamental para proteger tu salud financiera.

Algunas consideraciones para decidir si usas una tarjeta de crédito en tus compras navideñas:

1. Saldo total: Confirma que la cantidad que cargas a la tarjeta la puedes pagar en su totalidad al cierre del ciclo de facturación. Esto te ayudará a evitar intereses y mantener un buen historial crediticio.

2. Porciento utilización: Utiliza no más del 30% de límite aprobado y disponible. Mantener un bajo porcentaje de utilización es clave para preservar una buena puntuación crediticia.

3. Cashbacks: Opta por tarjetas que ofrezcan beneficios, como cashbacks o recompensas por tus compras. Estos pueden traducirse en reembolsos en efectivo o créditos que puedes aplicar a tu balance, lo que te permitirá reducir o saldar tu balance.

Mantén en mente que esas tarjetas que tienen programas de recompensa no representan que el dinero gratis ni que te lo regalan, sino que son un estímulo para aumentar gastos, y si no tienes control en tus compras, definitivamente será un problema para tus finanzas.

Pagar a tiempo es la clave para mantener una buena empírica. Mientras más controlado tengas los gastos, más sencillo será saldar la tarjeta y evitar los intereses acumulados que sigan aumentando ese balance.

Esa relación entre las compras y tu tarjeta es el mayor reto en estas próximas semanas. Mientras mejor administres ese vínculo, podrás terminar el año 2024 en mejor posición de lo que comenzaste.

Educarte y conocer cuáles son las mejores estrategias para el manejo adecuado del crédito y cómo funciona el puntaje crediticio, te permitirá alcanzar nuevos niveles de libertad y flexibilidad en tus decisiones financieras.

¡Felices fiestas con compras austeras!

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Presupuesto navideño: Regala experiencias